Sistemas tributarios del mundo
- Gomez, M., Maldonado, A., Martínez, M., Munguía
- Nov 8, 2016
- 6 min read
El sistema tributario es el nombre aplicado al sistema impositivo o de recaudación de un país. Consiste en la fijación, cobro y administración de los impuestos y derechos internos y los derivados del comercio exterior que se recaudan en el país, además administra los servicios aduanales y de inspección fiscal. La tendencia universal es a que haya varios impuestos y no uno solo. Podemos resumir que un sistema es conjunto de impuestos que rigen en un país en un determinado momento (Valdivia, 2010).
Se acepta que para que un sistema tributario sea bueno debe cumplir con las siguientes propiedades:
Eficiencia económica. viene dada por el nivel de cumplimiento de los márgenes de ingresos y la minimización del gasto público establecido en el presupuesto. Para que exista una eficiencia económica a través de los impuestos se debe establecer una política tributaria que ayude a la recaudación de los mismos. A pesar de que todos los impuestos en mayor o menor medida afectan los beneficios, y pueden alterar el comportamiento de los consumidores, productores o trabajadores, ya que se reduce la eficiencia económica. Un sistema tributario ideal debería minimizar en la medida de lo posible los efectos negativos sobre la eficiencia económica.
Sencillez administrativa: El sistema tributario debe ser fácil y relativamente barato de administrar.
Flexibilidad: debe ser capaz de responder fácilmente a los cambios de algunas estructuras impositivas e incluso se puede realizar automáticamente.
Responsabilidad política: el Estado no tiene que aprovecharse de los ciudadanos desinformados, y en el caso de la tributación, esta postura recomienda que se establezca claramente quien los paga. Se exige transparencia en los impuestos.
Justicia: debe ser justo en su manera de tratar a los diferentes individuos.
El Instituto de Estudios Fiscales británico (IFS, en sus siglas en inglés) encargó en 2006 al premio Nobel de Economía James Mirrlees el diseño de un sistema tributario óptimo. Este centro privado e independiente, dedicado a la investigación económica, que goza de gran prestigio académico, le encomendó “identificar las características de un buen sistema de impuestos para una economía abierta del siglo XXI y sugerir cómo el sistema impositivo británico, en particular, podría reformarse para aproximarse a ese ideal” (Sérvulo, 2013).
Entre las principales propuestas que hace el informe impulsado por el Instituto de Estudios Fiscales británico están:
1.- Integrar el impuesto sobre la renta y los beneficios sociales.
La propuesta consiste, básicamente, en fusionar el IRPF con las cotizaciones sociales y establecer un único beneficio social (prestaciones, dependencia) que reúna todos los existentes.
El problema de establecer un único programa de beneficios sociales es que “las situaciones familiares son cambiantes” y se corre el riesgo de que el impuesto no reconozca estas variaciones.
2.- Impuesto a las sociedades
Otra de las propuestas del Informe Mirrlees afecta al impuesto de sociedades. Plantea reducir al máximo el número de deducciones y establecer solo una por fondos propios, que sería equivalente al coste de oportunidad del capital de la empresa. De tal forma que cuantos más recursos propios tenga la sociedad, mayor es la deducción.
3.-Alternativa de IVA
Defiende que se unifiquen todos los tipos en uno solo y se eliminen los reducidos. Como defiende que hay que contemplar el sistema en su conjunto, elimina la progresividad en este impuesto.
México es uno de los países con menor carga fiscal en el mundo. A pesar del esfuerzo por modernizar al sistema tributario mexicano, tratando de adoptar prácticas internacionales, la recaudación como porcentaje del producto se ha mantenido muy por debajo de los países desarrollados, y a contracorriente de la tendencia de otros países con un nivel de desarrollo similar al de México que han venido incrementando sus ingresos tributarios.
Sistemas tributarios comparados
Los sistemas fiscales del mundo contemporáneo tienden a uniformarse. La mayoría de está convirtiendo en agencias autónomas del Estado, con un solo objetivo estratégico: lograr el máximo de recaudación por declaraciones voluntarias.
El caso de la Autoridad fiscal Española es que recauda el 98% por declaración voluntaria y el 2% por acciones de control (juicios, multas, etc.).
Los sistemas fiscales desarrollados (Alemania, EE.UU., Japón) recaudan tan sólo el 3-4% por aduanas, en tanto que el Impuesto a la Renta de empresas y personas naturales monta al 75-80% de los ingresos del Estado. En el caso de los EE.UU., los impuestos a la Renta Personal ya son mayores que los impuestos a la Renta Empresarial.
Los sistemas fiscales federales (Brasil, Argentina y EE.UU.) pueden proporcionar una ventana al futuro de cómo se formará el sistema fiscal regional. Colombia es el país que ya ha experimentado 12 años de regionalización tributaria.
El sistema tributario de Venezuela experimenta dificultades para desarrollarse. Los ingresos fiscales por el monopolio estatal de petróleo han ensombrecido el desarrollo de una cultura tributaria. Al igual que el guano y el salitre en el Perú del siglo XIX (1840-1879) el petróleo de Venezuela constituye el principal ingreso fiscal del Estado. (Giuduce, 2003).
Sistema Tributario en la UE
La UE no tiene un papel directo en el establecimiento y cobro de impuestos: cada Estado, y no la UE, es quien decide la cantidad de impuestos que pagan sus contribuyentes.
El papel de la UE consiste en supervisar las normas fiscales nacionales para garantizar que sean compatibles con las políticas europeas que:
Fomentan el crecimiento económico y la creación de empleo
Garantizan la libre circulación de mercancías, servicios y capitales en el mercado único de la UE
Velan por que no se favorezca injustamente a las empresas de un país sobre sus competidores en otros países
Garantizan que los impuestos no discriminen a los consumidores, trabajadores o empresas de otros países de la UE.
Las decisiones fiscales de la UE requieren la unanimidad de todos los Estados miembros. De ese modo se garantiza que se tengan en cuenta los intereses de cada país.
En el caso del IVA y de los impuestos especiales sobre la gasolina, el tabaco y el alcohol, los 28 gobiernos nacionales han decidido establecer un marco general de normas y tipos mínimos para evitar la distorsión de la competencia entre los países de la UE.
El principal cometido de la UE en cuanto al impuesto de sociedades y el impuesto sobre la renta es garantizar que se respeten los principios de no discriminación y libre circulación en el mercado único. Para lograr ese objetivo, cada vez se hace más necesario un enfoque europeo coordinado entre todos los países miembros que también permita hacer frente a retos comunes como la evasión fiscal.
Para finalizar, el sistema tributario que consideramos bueno y eficiente, es el chileno. Desde el punto de vista de equidad vertical, el sistema tributario chileno presenta algunas características orientadas a que los agentes de menor capacidad contributiva paguen menos impuestos. En efecto, la estructura progresiva de los impuestos a la renta de las personas contempla un primer tramo exento de pago y un tramo superior con una tasa marginal relativamente elevada.
Sin embargo, las personas en Chile no sólo pagan impuestos por sus ingresos, sino también por las transacciones de bienes y servicios que realizan. Entre estos impuestos se cuentan, entre otros, el IVA, los impuestos adicionales al IVA, los impuestos específicos, los aranceles aduaneros y las contribuciones de bienes raíces. Al contrario de los impuestos a la renta, que son progresivos, la mayor parte de estos impuestos operan con tasas proporcionales.
Al comparar los impuestos internos al consumo, en cambio, la situación relativa se revierte, ya que en el sistema tributario chileno dichos gravámenes representan más de un 10% del PIB. Este porcentaje pone al país en situación similar a la de algunos países europeos. En Chile, dentro de los impuestos al consumo, el IVA (18%) representa casi el 80%. La importante recaudación de este gravamen se explica en parte porque su tasa es relativamente elevada, pero sobre todo porque corresponde a una tasa única aplicada sobre una base bastante amplia. A lo anterior, también se agrega el hecho de que en Chile la tasa de evasión en el IVA es bastante menor que en el resto de los países latinoamericanos (SII, 2004).
Aparte de la ventaja de la tasa de evasión, los ciudadanos chilenos han mantenido una cultura de responsabilidad fiscal a lo largo del tiempo, ya que los beneficios de su recaudación, como contribuyentes los ven reflejados.

Fuente: OCDE, 2010.

Fuente: OCDE, 2010.
Referencias
Herrera Blanco, C., Torrejón, L. (2010). Tributación América Latina. 2016, de INSTITUTO DE ESTUDIOS FISCALES MINISTERIO DE ECONOMÍA Y HACIENDA Sitio web: http://www.ief.es/documentos/recursos/publicaciones/fiscalidad_internacional/TributacionAmericaLatina.pdf
Pecho, M. (2014). Promoviendo mejores sistemas tributarios. 2016, de CIAT Sitio web: http://www.ciat.org/index.php/es/blog/item/48-promoviendo-mejores-sistemas-tributarios.html
OCDE. (2008). Administración tributario en paises de la OCDE. Octubre 2016, de OCDE Sitio web: http://www.oecd.org/ctp/administration/46668703.pdf
OCDE. (2010). Estadísticas tributarias en América Latina: Chile. Noviembre 2016, de OCDE Sitio web: https://www.oecd.org/ctp/tax-global/Chile%20country%20note_final.pdf
Comments